La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) reconoció, oficialmente, los conocimientos y prácticas tradicionales para la elaboración y el consumo del casabe como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, luego de que fuera elegida mediante votación la propuesta multipaís presentada por la República Dominicana, Cuba, Haití, Honduras y Venezuela.
La Unesco justificó la declaración del casabe como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, destacando su relevancia como símbolo de identidad, cohesión social y desarrollo sostenible en las comunidades del Caribe.
Según el organismo, este pan redondo elaborado con yuca amarga refleja un legado indígena y africano transmitido de manera informal en los hogares y formalmente en las escuelas; promueve valores como la tolerancia, el respeto mutuo y la unidad; y contribuye a la seguridad alimentaria y al sustento económico de miles de familias.
Para la preparación del expediente, los cinco países realizaron múltiples reuniones de trabajo a nivel técnico, con el objetivo de presentar una nominación sólida que integrara los elementos históricos, sociales y culturales, así como los métodos de transmisión y la relevancia de esta práctica ancestral.
Se recuerda que la elaboración tradicional del casabe pasa así a formar parte del patrimonio cultural inmaterial de la República Dominicana, inscrito en la Lista Representativa de la Unesco, que ya incluía la tradición del Teatro Cocolo Danzante (Los Guloyas), la Cofradía del Espíritu Santo de los Congos de Villa Mella, el merengue y la bachata.