Ronda es la tercera ciudad más visitada en Andalucía y su Puente Nuevo y la Plaza de Toros son sus marcas de fábrica y dos de los lugares más reconocidos de la región.

A 100 kilómetros de Málaga en Andalucía, en la cima de una montaña y sobre una profunda garganta, se ubica la bella ciudad de Ronda a la que el poeta checo Rainer Maria Rilke, le daría su sobrenombre de “ciudad soñada”.
La garganta, El Tajo, separa la ciudad nueva del siglo XV del casco antiguo que data de la época de los árabes. Por su profundo cañón se mueve el río Guadalevín que divide la ciudad en dos. La ciudad forma parte del Parque Nacional de la Sierra de las Nieves.

Con poco más de 33.000 habitantes, Ronda es la tercera ciudad más visitada en Andalucía y su Puente Nuevo y la Plaza de Toros son sus marcas de fábrica y dos de los lugares más emblemáticos de la región.
Sabiendo de estos atractivos llegamos a Ronda para una visita de un día y medio en la que pudimos “sentir” la belleza de esta ciudad y la calidez de su gente.

Como corresponde, comenzamos por el famoso Puente Nuevo, una joya arquitectónica construida entre los años 1751 y 1793, con una altura de 98 metros y que une las zonas histórica y moderna de la ciudad. Con la construcción del puente, dicen los viejos habitantes del lugar, se consiguió un efecto mímesis, ya que el puente parece un elemento natural de la roca cuyo color se mezcla con las paredes del acantilado.
Su vista al profundo cañón y su entorno natural proponen un merecido tiempo para la contemplación y la fotografía. Pero, si la vista desde el puente es atractiva, no lo es menos la que se sugiere cerca del lecho del rio y después de un descenso sin mayores dificultades durante un tramo de no más de 100 meros. Allí la monumental obra se muestra en su plenitud y uno puede tomar debida nota de su inmensidad.

Dejamos el puente, hicimos una parada para una caña y un clásico bocadillo de jamón serrano y pusimos rumbo al otro sitio tradicional de esta ciudad: la Plaza de Toros. Es una de las más antiguas de España y en su interior guarda un museo taurino que narra detalladamente, la historia de la tauromaquia en la ciudad.
La Plaza Museo de la Real Maestranza de Caballería de Ronda (tal su denominación completa) es uno de los conjuntos culturales con mayor número de visitas de Andalucía. Fue inaugurada en 1785 y desde 1993 es Bien de Interés Cultural de la Ciudad.
El museo, famoso como pocos en el mundo de las corridas de toros, alberga tres colecciones altamente valoradas en España: la Real Guarnicionería de la Casa de Orleans, la Colección de la Tauromaquia y la sala de la Historia de la RMR.
Por su historia, por su arquitectura, por su carácter y por su belleza está reconocida como una de las más antiguas de España y una de las más monumentales que existen. Su ruedo tiene un diámetro de 66 metros lo que la hace única entre las plazas de toros tradicionales.
Un datito: para ver la plaza en su plenitud, nada mejor hacerlo tomando una cerveza bien fría en el Restaurante Panorámico, que pertenece al Hotel Catalonia Ronda que se ubica a pocos metros de la Plaza.
Las últimas horas en Ronda fueron para recorrer el bellísimo parque Alameda del Tajo compuesto por 5 avenidas paralelas las que desembocan en los balcones desde se tienen fantásticas vistas de la Hoya del Tajo y las Serranía de Ronda. Por supuesto que visitamos el famoso “Balcón del Coño” que recibe tal denominación por la expresión que suelta cada uno de los que nos animamos a asomarnos y dar cuenta de su altura. Entre otros tantos monumentos y estatuas, el Parque guarda la de Pedro Romero, el torero más famoso de Ronda y también rinde homenaje a personajes de las artes como Ernest Hemingway y Orson Welles quienes tienen su lugarcito en el parque y, como rezan las placas, en el corazón de sus habitantes.
Ah, para despedirnos, no vimos en el centro de Ronda un solo semáforo. Tampoco vimos una discusión entre conductores.










