Los folletos de turismo dicen que 800 de estas simpatiquísimas criaturas de bronce se esparcen por la ciudad. La mayoría de ellas se encuentran en el caso histórico donde, día a día, miles de visitantes, como lo hicimos nosotros, agudizan la mirada para ir descubriéndolas en cada rincón de la geografía urbana.
Wroclaw o Breslavia es la tercera ciudad de Polonia en tamaño y se ubica al suroeste del país, junto al río Óder. También se la conoce como la Venecia del norte porque está rodeada por canales y acaba de ser nombrada por la Unesco como la capital Mundial del Libro. Es una ciudad con encanto, en la que la Plaza del Mercado, el Ayuntamiento Antiguo y el Panorama de Raclawice se imponen como la “marca ciudad”. Sin embargo, para nosotros, en nuestra visita de medio día, camino a Varsovia, fueron los gnomos los que calzan ese rótulo.
Dicen los catálogos de turismo que alrededor de 800 de estas simpatiquísimas criaturas de bronce se esparcen por la ciudad. Por supuesto que la mayoría de ellas se encuentran en el caso histórico donde, día a día, miles de visitantes no dejan de maravillarse por la arquitectura del lugar y también, como nosotros y agudizar la mirada para ir descubriéndolos en cada rincón de la geografía urbana, aún en los lugares más insólitos.
Qué son los gnomos? Son unas figuras de pocos centímetros de altura que representan oficios y trabajos. La tradición da cuenta que nacieron como un símbolo anticomunista: en la década de los 80, el movimiento opositor “Alternativa Naranja” utilizó estos simpáticos personajes para ridiculizar al régimen comunista. Cómo lo hacian? Pintaban a los personajes con gorros naranjas sobre los muros que censuraban mensajes críticos, y durante las protestas, los manifestantes se vestían como ellos.
Con el paso del tiempo y el cambio del régimen político, los gnomos, que son una verdadera legión en Wroclaw, han dejado de tener relación con la política y se han convertido en una de las principales atracciones turísticas de la ciudad.
Sin embargo, también hay otras versiones de por qué estos personajes tan simpáticos viven aquí. Una de esas leyendas cuenta que un diablo molestaba a los vecinos de la ciudad que, ya cansados, pidieron ayuda a los gnomos quienes lograron espantar al diabillo y así dejar contentos a los habitantes de la ciudad. La recompensa fue que les permitieron quedarse a vivir junto con ellos.
Desde entonces, los gnomos de Wroclaw forman parte de su identidad y descubrirlos es una suerte de búsqueda del tesoro urbana. Un ejercicio altamente recomendable para los espíritus viajeros y que nosotros cumplimos puntillosamente. Descubrimos decenas de ellos, habrá que planear el regreso para dar con los que nos faltaron.
